Concurso: Cuentos premiados cortos para la Adquisición de Valores. 2006-2007 WAECE-Unesco.
Para fomentar la Sensibilidad.
Soy el rey de las cosquillas, me gustan muchísimo. Me gustan por la mañana al levantarme y después de desayunar, cuando salgo de la escuela y antes de cenar.
Mamá dice que soy Pablo, el Rey de las cosquillas.
Son divertidas y mágicas. Cuando algo no me gusta, parece mejor con cosquillas. Si me enfado las cosquillas me dan risa y cuando estoy con mis amigos también les regalo cosquillas.
Sara es mi mejor amiga y se cayó del tobogán. ¡No podía parar de llorar!.
Le dí un beso, me miró y lloró aún más.
Me daba mucha pena verla así y le dije :»Hola soy el rey de las cosquillas». Y su cara empezó a cambiar. Cuando empezé a hacerle cosquillas ya no sabía si reír o llorar. La rodilla le dolía igual pero no hay nada que no se pueda curar. Ahora va un poco cojita, pero nos miramos y reímos.
No me gusta ver a nadie llorar, o pelearse, o decir cosas que suenan bastante mal. Cuando alguien está triste yo también lo suelo estar, pero si sonríe eso ya me gusta más.
Cansados, tristes, enfadados, peleados…no hay nada que una buena sesión de cosquillas no pueda arreglar.
¿Y a tí? ¿Te gustan las cosquillas?.